Dassanech


«Un artista sabe que no hay belleza sin forma pero también que la forma de la belleza depende del ideal de una cultura. El artista trasciende, parcial y momentáneamente, el dilema, añadiendo un factor: no hay belleza sin mirada. Es natural que un artista privilegie a la mirada. Pero un gran artista no invita no sólo a mirar sino a imaginar».
– Carlos Fuentes

Las duras condiciones en las que se resuelve la vida en la meseta africana, exige unas respuestas de adaptación muchas veces difíciles de explicar. La tribu Dassanech representa todo un ejemplo de supervivencia ante las adversidades, y es que este pueblo etíope se ha desarrollado en uno de los ecosistemas más desfavorecidas de áfrica. Reflejo de la rudeza de su forma de vida son sus toscas viviendas: chozas en forma de iglú construidas con estructuras de ramas y recubiertas de papiro d el delta, de cuero o, en su mayoría, con chapas de metal.

Dassanech significa “Gente del Delta”. Desde hace siglos habitan tierras de Etiopía y Kenia, en la costa norte del lago Turkana y más al norte a lo largo del río Omo. El lago Turkana, el lago desértico más grande del mundo, dependiendo de la época de lluvias se expande o se contrae, pero actualmente, debido a las consecuencias del aumento de las temperaturas causado por el cambio climático y a la pertinaz sequía de la zona, cada vez se estrecha más. Si a esto añadimos la construcción de presas que disminuyen el caudal que lo alimenta y el aumento del uso del agua del río Omo para el riego, podemos hacernos idea de como cada vez la supervivencia se complica más en esta zona.

Hoy en día, la gente de Dassanech han dejado de ser exclusivamente pastores nómadas y complementan sus ingresos con el cultivo de sorgo o maíz en las riberas inundadas del río Omo y, en algunos casos, con la pesca. Los Dassanech afirman que todo comenzó en el siglo pasado, haber perdido gran parte de sus tierras a manos de sus enemigos: los turkana, los gabra en Kenia y los nyangatom y los hamar en Etiopía. Esto se tradujo en reducciones masivas en la cantidad de ganado, lo que obligó a mucha gente a adoptar estrategias alternativas de sustento: cultivo y pesca. Algunos se empobrecieron tanto que para sobrevivir tuvieron que recurrir al lago Turkana, donde pescan y cazan cocodrilos e incluso ocasionalmente hipopótamos.

Su organización social está regida por grupos de edad, una de las instituciones políticas más antiguas de África, que divide a las personas en categorías de edad, con fines tanto políticos como económicos y sociales. Los hombres de Dassanech son reconocidos en la zona por su estético peinado, que no es si no un signo de su posición en el sistema de edad.

El pueblo Dassanech se divide en ocho clanes con su propia identidad y costumbres. Cualquier persona, hombre o mujer, será admitida en ellos, siempre que acepte ser circuncidada. Y es que aquí, por desgracia, aunque cada vez en menor medida, se sigue practicando la mutilación genital femenina. Cuando se completa el ritual, las madres regalarán a su hija un collar, que lucirá con orgullo. Poco después contraerán matrimonio. La ceremonia más grande en la vida de un hombre será la Dimi, cuyo propósito es celebrar y bendecir a su hija por su futuro matrimonio y su fertilidad. Desde ese momento, el padre pasa a engrosar el grupo de edad de los hombres ancianos.

Las mujeres Dassanech usan una tela de colores brillantes que atan en la cintura, llevan la parte superior del cuerpo desnuda, sólo decorada con sus enormes collares, y los pies siempre van descalzos. Sus adornos son muy peculiares: la mayoría tiene pequeñas perforaciones debajo del labio inferior que decoran con detalles coloridos, como plumas. Pero si algo caracteriza a este pueblo, es la capacidad de convertir en un objeto bello aquello que la sociedad tecnológica “civilizada” deshecha por obsoleto. Esta vena estética puede sorprender con los complementos más inverosímiles a la hora de decorar sus cabezas. Todo vale.

Los Dassanech, una sociedad anclada en principios “primitivos”, algunos de ellos que sobrepasan los límites de la dignidad humana, y para los que los avances de la sociedad moderna no tienen ningún valor más allá del estético. Curioso.






Recent Portfolios